lunes, diciembre 17, 2007

El contraataque - Secuencia 6

(VIENE DEL POST ANTERIOR)

INT. DESPACHO DE VÍCTOR - DÍA
Al día siguiente, por la mañana, Víctor está mirando unos folletos de teléfonos móviles.

VÍCTOR
(Gritando)
¡Mamen!

La secretaria entra rauda en el despacho.

VÍCTOR
(Sacando dinero de la cartera)
Toma estos mil quinientos euros y te vas a comprarme dos móviles de tarjeta.
MAMEN
Pero esto es muchísimo dinero, Víctor.
VÍCTOR
Las cosas hay que hacerlas bien. Tengo aquí un folleto.

Víctor mira el folleto y lee.

VÍCTOR
Con cámara, cuatribanda, bluetooth, G3 con email, ligeritos de peso, de poco tamaño y elegantes, no quiero horteradas, eh.

MAMEN
Siendo así...
VÍCTOR
Ah, y libres, para poder cambiar de operador si me da la gana.

Mamen asiente, coge el dinero y el folleto.

INT. BAR DEL MADRID DE LOS AUSTRIAS - DÍA
Víctor está sentado en una mesa cuando entra Aurelio.

En la mesa de al lado de Víctor hay un NIÑO GORDO con dos amigos. El niño está jugando con una PSP, mientras envía y recibe SMS con su móvil a la velocidad del rayo, algo que hacen también los otros dos sin parar.

VÍCTOR
Mira lo que traigo.

Víctor saca orgulloso los dos teléfonos móviles.

VÍCTOR
¿A que son una pasada? Bluetooth, G3, email, manos libres, camarita... La hostia. Coge, coge. Éste es el tuyo.

Aurelio lo coge y no sabe ni cómo encenderlo, lo mira como si fuese un artilugio extraño. Víctor se impacienta y se lo enciende él.

VÍCTOR
Coño, Aure, que se enciende aquí. Como todos. Parece que nunca has usado un móvil.

AURELIO
Es que nunca lo he usado.
VÍCTOR
No jodas.

Aurelio niega con la cabeza. El niño gordo de al lado SE DESCOJONA, mientras sigue con lo suyo.

NIÑO GORDO
¡Qué torpe!

Víctor mira un poco torcido al niño.

AURELIO
(Leyendo la pantalla)
Introduzca PIN. ¿Y esto?
VÍCTOR
Son cuatro cifras: 1, 2, 3 y 4. No te lo he cambiado.

AURELIO
(Tecleando)
No hace nada.
VÍCTOR
Coño, Aure, después hay que darle a Aceptar.

El NIÑO GORDO se vuelve a DESCOJONAR.

NIÑO GORDO
¡Pero mira que es inútil el pureta!

Víctor lo mira ya bastante mal.

AURELIO
Ah, ya. ¿Y ahora?

VÍCTOR
Pues ahora a llamar. Te he memorizado mi número.
AURELIO
Ah.

VÍCTOR
También podemos enviarnos mensajes.
AURELIO
¿Mensajes?

El niño gordo SE DESCOJONA ostensiblemente por tercera vez.

NIÑO GORDO
¡Ni siquiera sabe lo que es un mensaje!, ¡menudo carcamal!
VÍCTOR
En la caja hay un librito. Te lo estudias y ya está. Ahora vuelvo.

Víctor se levanta resuelto y parece que se va.

AURELIO
¿A dónde vas?

Víctor le hace una seña de que no se preocupe y camina hacia una parte del bar, a la espalda del niño gordo. Se acerca y, por detrás, le da un HOSTIÓN a mano abierta en el careto. El susto es cojonudo, los otros dos se quedan mudos y el gordo, cuando sale del susto, arranca a LLORAR. Víctor se agacha y le habla al oído.

VÍCTOR
(Susurrando)
No se ríe uno de la gente, hombre. Hay que estarse calladito.

El PADRE DEL NIÑO GORDO (otro gordo), que estaba en la barra y no ha visto nada, al oír a su niño llorar a voz en grito se acerca a ver qué pasa y ve a Víctor al lado del niño.

PADRE DEL NIÑO GORDO
¿Qué ha pasado?
VÍCTOR
He venido a ver, del susto que me ha dado. Ha debido darse con la ventana el pobrecito.

El niño, parando un poco de llorar, e hipando, mira a Víctor, el cual hace señas discretas de cascarle otra vez.

PADRE DEL NIÑO GORDO
¿Ha sido eso?
NIÑO GORDO
(Suspirando)
S-s-sí. Me di con la ventana. Sin querer.

El padre se acerca y LE DA OTRO BOFETÓN del otro lado.

PADRE DEL NIÑO GORDO
¡Pero serás torpe, joder!

El niño vuelve a LLORAR a más volumen todavía. Mientras, Víctor paga la cuenta y le indica a Aurelio que se van.

EXT. CALLES DEL MADRID DE LOS AUSTRIAS - DÍA
Salen del bar, mientras SE OYEN todavía los lloros del niño.

VÍCTOR
¿Te parece que vayamos a tu casa?
AURELIO
(Extrañado)
¿A mi casa?, ¿por qué?
VÍCTOR
Un sitio discreto: nuestro cuartel general.
AURELIO
(Nervioso)
Esto, yo, no sé...
VÍCTOR
No se hable más.

No hay comentarios: