(VIENE DEL POST ANTERIOR)INT. CASA DE AURELIO - DÍA
Aurelio y Víctor están en el sofá.
AURELIO
Que sí, el lunes cojo un millón de la saca y voy a pagar.
VÍCTOR
No puedes. Ese dinero hay que centrifugarlo.
AURELIO
¿Qué?
VÍCTOR
Suavizarlo.
AURELIO
¿Qué?
Víctor coge una de las novelas de atracos y pasa páginas.
VÍCTOR
Coño, algo de lavadora, joder...
(Lo encuentra)
Blanquearlo, blanquearlo.
AURELIO
¿Y eso qué es?
VÍCTOR
Legalizarlo. Si no, Hacienda irá a por ti. Espera un momento...
Víctor rebusca entre los DVDs y entresaca una peli.
VÍCTOR
Estúdiate esta peli y aplícatelo.
AURELIO
¿Y tú, no blanqueas?
VÍCTOR
Es que yo solo debo dinero negro.
En ese momento SUENA el móvil de Aurelio. Los dos se sobresaltan.
VÍCTOR
¿Tú le has dado este número a alguien?
AURELIO
N-n-no.
VÍCTOR
Descuelga, descuelga.
Aurelio descuelga, temblando.
AURELIO
¿S-s-sí?
LUCÍA
(OFF, sonido telefónico)
¿Aurelio? Soy Lucía.
AURELIO
Lucía. ¿Cómo tienes este número?
LUCÍA
Lo apunté, cuando lo del PUK.
AURELIO
Ah, ah. Bueno, o-oye, estoy liado, mañana nos vemos.
LUCÍA
Aurelio, tengo que verte, voy a tu casa.
AURELIO
(A Víctor, tapando el auricular)
Dice que viene para acá.
Víctor dice que no insistentemente con el dedo.
AURELIO
No puedes venir a mi casa.
LUCÍA
¿Por qué?
AURELIO
Es que, que... están acuchillando el parqué y el olor es tóxico.
LUCÍA
¿Pero tú no tenías baldosa?
AURELIO
Parqué simulando baldosa, pero parqué. Oye, voy yo a tu casa.
LUCÍA
¿En el bar de mi calle?
AURELIO
Vale, en una hora allí. Adiós.
Cuelga.
VÍCTOR
¿Qué pasa, campeón, has ligado?
AURELIO
¿Yo?, no sé.
VÍCTOR
Ya sé que no sabes, pero a lo mejor te ha ligado ella.
AURELIO
Digo que no sé si he ligado.
VÍCTOR
¿Y qué tal está de tetas?
AURELIO
Hombre, pues bastante b... Víctor, joder, que es mi amiga.
VÍCTOR
Muy bien: buenas tetas.
EXT. CALLE DE BARRIO DE MADRID - DÍA
Aurelio llega a la calle de Lucía, en un barrio popular de Madrid, ve lo que él piensa que es el bar donde han quedado y entra (desde fuera VE sillas y mesas de bar).
VEMOS cómo le ha seguido Julio el segurata, vestido de paisano. Se queda en el exterior apostado, disimulando detrás de un árbol en un parquecito. Mientras está vigilándole, un perro le mea la pernera del pantalón y el zapato. Nota la humedad.
JULIO EL SEGURATA
(Mirando hacia el pie)
¿Qué hostias?
Ve que es un perro pequeñajo y le da un ZAPATAZO (VEMOS al perro salir volando de detrás del árbol mientras AÚLLA).
INT. PASTELERÍA SALÓN DE TÉ - DÍA
Aurelio está en la barra. Se le acerca la CAMARERA.
CAMARERA PASTELERÍA
¿Qué deseaba?
AURELIO
Una cerveza, por favor.
CAMARERA PASTELERÍA
No tenemos.
AURELIO
Anda, vaya bar más raro.
Mira a su alrededor, viendo bandejas de pasteles, un par de ancianas en una mesa tomando pastas con té y la chica frente a él, sonriente.
CAMARERA PASTELERÍA
Y bien, ¿qué le pongo?
EXT. CALLE DE BARRIO DE MADRID - DÍA
Al rato, Aurelio sale como aventado de la pastelería, claramente equivocado y mirando a todos lados a ver si alguien ha visto su equivocación (lleva un paquetito en una mano). Finalmente, se fija en un local cercano, que sí es un bar. Se toca la frente, como si tuviera fiebre.
AURELIO
(Hablando solo)
Vaya dolor de coco.
Observa allí cerca una farmacia. Va hacia ella.
EXT. PUERTA DE LA FARMACIA DE BARRIO - DÍA
La farmacia tiene la puerta cerrada. Es de éstas que tiene un timbre cerca de la puerta para llamar. Aurelio va hasta el timbre, un pelín alejado de la puerta, y le da al pulsador. SUENA en la puerta el "BUZZZ" típico de una cerradura eléctrica. El timbre realmente por el día abre la puerta directamente, no suena dentro. Aurelio se percata.
AURELIO
(Murmurando)
Ah, ya está abierta.
Va hacia la puerta, la EMPUJA y se da una hostia de narices con ella. Parece que al dejar de hacer “buzzz” se ha cerrado. Vuelve a acercarse al timbre, le da al botón, SUENA el "BUZZZ" y, un poco más rápido que antes, vuelve a EMPUJAR la puerta. Nada. Cerrada. Repite, haciendo el movimiento entre el timbre y la puerta de un saltito, para ser más rápido. Nada. Cerrada. Deja el paquete en el suelo, e intenta mantener el timbre pulsado y abrir la puerta con la otra mano. No llega. Con una pierna. No llega. Prueba al revés, EMPUJANDO la puerta y tratando de tocar el timbre con el otro brazo o la otra pierna. No llega. Se estira todo lo que puede con los brazos y da un saltito después del timbrazo. Nada. Se da por vencido, recoge el paquete del suelo y, en ese momento se abre la puerta de la farmacia, HACIA FUERA, y sale Lucía. Aurelio se queda patidifuso.
LUCÍA
Aurelio, ¿me habías visto dentro?
AURELIO
Eeeh, sí, jeje, me pareció.
LUCÍA
El bar está aquí al lado. ¿Vamos?
AURELIO
Sí, claro.
Aurelio se toca la frente otra vez. Lucía, mientras, repara en el paquetito que Aurelio lleva.
LUCÍA
¿Qué llevas ahí?
AURELIO
¿Esto? Buf, no te lo vas a creer.
Se dirigen al bar. El segurata los vigila detrás del árbol. Vuelven a mearle en la pierna.
JULIO EL SEGURATA
Me cago en tu puta madre.
Sin mirar, le da otra patada al perro. Sin embargo, esta vez, el perro no sale volando, más bien le ha dado una patada a un yunque, mira para abajo y ve un bulldog, gordo y pesado, al que acaba de dar una patada y está furioso.
JULIO EL SEGURATA
¡Hostias!
El perro LADRA y le muerde la pierna. El segurata intenta zafarse del perro permaneciendo oculto tras el árbol. Aurelio y Lucía OYEN LOS RUIDOS mientras caminan hacia el bar, y miran a ver, pero no consiguen ver al segurata tras el árbol.
INT. BAR DE BARRIO DE MADRID - DÍA
Sentados en una mesa, Aurelio termina el relato.
AURELIO
Y como me dio tal corte, pues le pedí media docena de pasteles.
LUCÍA
(Empezando a reírse)
¿Pasteles?
AURELIO
Sí, pero variados, eh.
A ella le hace mucha gracia y SE RÍE a carcajadas.
LUCÍA
Bueno, podemos merendarlos, ¿no?
INT. BAR DE BARRIO DE MADRID - MÁS TARDE
Aurelio y Lucía ya se están merendando los pasteles.
LUCÍA
Aurelio, sé que estás metido en el robo al furgón.
Aurelio, que estaba bebiendo un poco de cerveza, casi se ahoga y tose mucho. Al rato, recupera el aliento.
AURELIO
Eeeh, n-n-no, estás equivocada, yo no...
LUCÍA
Te lo oí todo en el baño.
AURELIO
¿En el baño? ¿Y qué hacías tú en el baño? ¿Eres una pervertida?
LUCÍA
Aurelio, que el que estabas en el de mujeres eras tú.
AURELIO
Ah, ¿sí?
(Se derrumba)
Mira, sí, es cierto, no puedo más. Denúnciame si quieres.
LUCÍA
Yo no voy a denunciarte, Aurelio. Pero, ¿por qué lo hiciste?
AURELIO
La Gran Polla.
LUCÍA
(Asombrada)
¿Qué dices?
AURELIO
Es un poco largo de contar.
LUCÍA
Tenemos muchos pasteles.
Lucía sonríe, cogiendo un pastel y llevándoselo a la boca.
INT. BAR DE BARRIO DE MADRID - MÁS TARDE
Los dos están embadurnados del merengue de los milhojas.
AURELIO
Y ésa fue la movida. Ya ves mi tía abuela la que me organizó.
LUCÍA
No está mal, no.
AURELIO
Yo no soy un ladrón, pero es que...
LUCÍA
(Lo mira embelesada)
Aurelio, tú eres muy buena persona. ¿Sabes una cosa?
AURELIO
No, pero es que quizás me dejé liar por Víctor... Él es muy buen tipo, pero tiene un arranque...
LUCÍA
(Cortándole)
Estoy completamente enamorada.
Aurelio se queda un rato en silencio.
AURELIO
¿E-namorada?, ¿de-de mí?
LUCÍA
No, del camarero.
Aurelio mira al camarero.
AURELIO
Ah, el chico es guapo, sí.
LUCÍA
¡Aurelio!
AURELIO
¿Qué?
LUCÍA
De ti, hombre. Enamorada de ti.
Entonces ella le coge la cara y, llenos como están de merengue, le da un beso en la boca.
LUCÍA
¿Te ha quedado claro ahora?
AURELIO
Clarísimo.
El camarero los mira desde la barra. Ambos se relamen.
CAMARERO BAR DE BARRIO
Anda, que los hay empalagosos de cojones.
EXT. CALLE DE BARRIO DE MADRID - DÍA
Salen del bar los dos juntos y se van. Pasa un rato.
JULIO EL SEGURATA
(OFF)
Me cago en la hostia, y se marcha el tonto a las tres éste...
VEMOS en lo alto de un árbol del parquecillo al segurata, con la parte de abajo de la pernera del pantalón deshilachada y el bulldog y el perrito pequeñajo de la primera patada, abajo LADRÁNDOLE a dúo.
